martes, 26 de octubre de 2010

QUE ES UN OVNI Y QUE BUSCAN











Pero, bajo el categorema OVNI caben múltiples entes, por lo cual la pregunta necesita ser modificada. Me parece que tal vez fuese más acertado preguntar ¿a qué se le llama OVNI?



Y esto nos lleva de la mano al origen. En primer lugar, la palabra OVNI es una sigla que significa Objeto Volador No Identificado. Ni más, ni menos que eso.

Es una traducción del original en inglés U.F.O., designación inventada en 1952 por un militar de Inteligencia de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, el Capitán Edward J. Ruppelt.



En su libro “The Report on Unidentified Flying Objects” (Doubleday & Company, Nueva York, 1956, 315 págs.) Ruppelt explica: “UFO es el término oficial que yo creé para remplazar las palabras “platos voladores”. (pág. 13).



Como una connotación al margen, pero que no hay que dejarla de tener en cuenta cuando esto se pone en el contexto de la entonces Guerra Fría, la pronunciación de UFO, es you foe, que significa “Ud. enemigo”. Digo esto porque de un punto de vista práctico, y tremendamente importante para la defensa de Estados Unidos en aquellos tiempos, algo “no identificado” en el cielo podía ser eventualmente una nave o misil soviético y por tanto, implicar que se era espiado o se estaba bajo ataque.



Tan fue esto así, que la propia Fuerza Aérea creó el Ground Observers Corp, el Cuerpo de Observadores Terrestres (noviembre de 1951), que reunía a ciudadanos que voluntariamente se ofrecían para observar el cielo y –siguiendo un preciso manual de instrucciones—denunciar el avistamiento de cualquier cosa que les pareciera extraña.



Con el transcurrir del tiempo, muchos ufólogos (ovnílogos) se dieron cuenta que la sigla era insuficiente o no podía aplicarse estrictamente a la realidad, por cuanto se habla de “objeto” y muchas veces se trata de manifestaciones energéticas. Se habla de “volador”, pero a veces hay cosas en tierra.



Finalmente, la parte más interesante de la sigla son las dos últimas palabras “no identificado”. Inmediatamente hay que preguntarse: ¿por quién?, ¿cuándo?, y hasta ¿dónde?.